Ir al contenido principal

De cuerpo entero

Desde hace un tiempo practico el total look, es decir, cojo un color y dejo que me invada. Hay clásicos como el negro, envolventes como el rojo, efectivos como el azul o favorecedores como el verde.

Si optamos por el negro, tenemos la suerte de que mezclar diversas texturas puede quedar muy bien. Así un top lencero con unos jeans negros si los fusionas con una chaquetita puede dar un resultado espectacular. Ideal romper con pequeños detalles como accesorios en camel, desde un cinturón trenzado y unas botas del mismo tono camel a una minicazadora en rojo marsala, por ejemplo. Como ya seguro que sabéis, el negro suaviza curvas y estiliza mucho por lo que es un color muy recomendable. Ahora bien, como te digo, los accesorios mejor en otros colores para no parecer una viuda negra. El abrigo o cazadora que no sea del color del regaliz, please.

Que hemos decidido lanzarnos al rojo, habrá que estar muy atentas a no pasarnos con los mix. Si con el negro admitimos muchos tonos, no todos los rouge valen. Algunos pueden matarse entre ellos. Personalmente, con este color no arriesgaría ni un poquito en cuanto a romper el total, así que nada de dorados o platas, apuesta por marrones y negros. Poquito accesorio o muy estudiado para no parecer un experimento.

El azul colegiala ha llegado hace mucho a nuestros armarios y se deja llevar con todo tipo de tonos y tejidos. Quedará genial un liso con un azul denim o acolchado. El negro está súper permitido salvo que al verte en el espejo te recuerde a un cuerpo de seguridad o te veas muy en plan uniforme. Si a un vestido de punto azul le metes unas medias animadas donde predomine el mismo, quedará deslumbrante. En cuanto a zapatos o botas, ahí si doy la razón a los clásicos que no quieren juntos blue & black, pues el negro no me gusta para romper el look, mejor marrón claro o un genial mostaza (que hoy puede ser yema o curry).



Finalmente, me ha conquistado el verde en (casi) toda su extensión: caqui, mesa de billar, botella, mint, turquesa, oliva… Para este tiempo los tonos pistacho o wasabi no los recomiendo. Así que si quieres cogerte unos pantalones verdes caqui y sumarle un jersey verde musgo  rematando el look con unos pendientes étnicos en los que predominen colores tierra darás mucha guerra. No dudes en pintarte las uñas de rojo o en green también.

Como veis la paleta de invierno puede provocar modelos muy interesantes. Abre tu armario y deja que entren colores que te hagan vibrar.

Feel beautiful¡¡¡


Comentarios

Entradas populares de este blog

Soñar despierto y volar: Hipnonautas

Nuestro cerebro es infinitamente más fantástico de lo que estamos dispuestos a admitir. Tuve la suerte de tener una coach en el trabajo que si me oyera, me diría: "Te lo dije: mira tu realidad. Depende de ti". Visualiza, visualiza... Es algo que empecé a practicar hace tiempo y que me ha ido ayudando  en muchos momentos de la vida, de esos que no crees que vendrán pero que con esfuerzo suceden. Todo este derroche de pensamientos se lo debo al espectáculo de hipnosis "Hipnonautas"*  al que acudo en el Teatro Lara, que me devuelve esa sensación que a veces casi olvido de que todo depende de nosotros. A la hora del vermut, el maestro de ceremonias es Jorge Astyaro , un tipo alto, bien parecido, que con su voz nos conduce durante algo más de dos horas atravesando fronteras entre lo real y lo imaginado. Fascinante e incomprensible a partes iguales. Una momento de Hipnonautas Me confieso algo confundida porque sí me llegó pero por temor o pereza, no sé, n

Las horas

Vuelvo enroscada en un montón de sensaciones. Unas no quiero que me invadan y otras deseo que no me abandonen nunca. No me puedo dejar llevar por el temor ni por el mal rollo y adoro sentirme tan viva. Mis tardes se hacen relativamente elásticas gracias al montón de actividades y el chute de emociones que me están regalando muchos desconocidos que he descubierto. Lo comparto contigo porque tenemos que poder con esto. Después ya veremos cómo salir de lo demás. De momento a quemar horas disfrutando de la luz. A las 17:30 todos los días, Alicia G. Rey de Mindandtangle me da la paz. Me está enseñando a hacer yoga con mi cerebro a través de sus talleres de Zentangle. Muchas gracias de corazón. Está siendo toda una experiencia. A las 18:30, Eli Kapowski me inyecta energía mientras pincha desde su balcón everyday. Otro descubrimiento que me alegra el cautiverio. La DJ del Corona. Olé tú. Sigue, sigue. Sus sesiones colgadas en Mixcloud son la bomba. El Museo de Arte Moderno

Cómo cocinar una boda (I): el vestido, of course

Me encantan los vestidos de boda… pero en otras. Los blancos en todas sus tonalidades, los perlas… Me parecen fantásticos, si bien creo que nunca me casaría vestida de princesita. Me sentiría disfrazada y no as I am. Sin embargo, como ya os he confesado, me gusta en otras y me emocionará en una amiga. En la primera que une su vida a otra persona en una ceremonia, reconociendo ante todos sus seres queridos que ese ser es especial. Por su parte, a Inés el traje le da un poco igual y lo deja en las expertas manos de Alex convirtiéndonos a Lupe y a mí en su representante, evitando que a nuestro especialista no se le vaya la cabeza y dilapide el capital en una prenda que solo se pondrá ese día, argumenta ella mientras él la recuerda que es un día trascendental y que todos los ojos estarán puestos en la novia y que las fotos y el vídeo recogerán aquel momento especial, haciendo imprescindible, no un modelito, sino el modelazo. Alex está enamorado del vestido rojo de flores que Hannibal Lagu